Ubicación
Andalucía se localiza en una latitud entre los 36º y los 38º44' N, en la zona templado-cálida de la Tierra, dando a su clima características muy definitorias como la bonanza de sus temperaturas y la sequedad de sus veranos. Sin embargo, en el amplio marco definido por sus límites existen unos grandes contrastes internos. De esta forma, se pasa de las extensas llanuras litorales del río Guadalquivir –a nivel del mar– a las zonas más altas de la península en Sierra Nevada. Contrasta la sequedad del desierto de Tabernas con el Parque Natural de la Sierra de Grazalema, la más lluviosa de España. Más significativo, si cabe, es el tránsito de las cumbres nevadas del Mulhacén a la costa subtropical granadina, a escasos 50 km.
Relieve
El relieve andaluz se caracteriza por el fuerte contraste altitudinal y en la pendiente. Entre sus fronteras se dan las mayores cotas de la Península Ibérica y casi un 15% del territorio por encima de 1.000 m; frente a las zonas deprimidas, con menos de 100 msnm de altitud en la gran Depresión Bética. En las pendientes, se produce el mismo fenómeno.
En cuanto a las costas andaluzas, el litoral atlántico se caracteriza por un predominio abrumador de playas y costas bajas; por su parte el litoral mediterráneo tiene una presencia muy importante de acantilados sobre todo en la Axarquía malagueña, Granada y Almería.
El carácter disimétrico es tal que va a configurar una división natural entre la Alta y la Baja Andalucía, en base a las principales unidades del relieve:
- Flora
A rasgos generales, la vegetación típica de Andalucía es el bosque mediterráneo, caracterizado por vegetación de hoja perenne y xerófila, adaptada a lo largo del período estival de sequía. La especie climácica y dominante es la encina, si bien, son abundantes los alcornoques, los pinos, los pinsapos, entre otros y por supuesto el olivo y el almendro como especies cultivadas. El sotobosque dominante está compuesto por especies leñosas de tipo espinoso y aromático: especies como el romero, el tomillo, y la jara son muy típicas de Andalucía. En las zonas más húmedas y de suelos ácidos, las especies más abundantes son el roble y el alcornoque, y como especie cultivada destaca el eucalipto. También son abundantes los bosques en galería de especies frondosas: álamos y olmos, e incluso el chopo como especie cultivada en la vega granadina.
El bosque andaluz está muy alterado por el largo proceso de ocupación histórica, las roturaciones de las mejores tierras para el cultivo, los abundantes incendios forestales. La garriga -de carácter arbustivo- es la vegetación típica en las zonas de bosques degradados. Ante ésta problemática se ha recurrido a la repoblación de extensas zonas con especies no climácicas como el pino. En la actualidad existe una clara política conservacionista de los espacios forestales restringidos a las áreas montanas.
- Fauna
Los humedales andaluces, albergan una avifauna muy rica, por la combinación de especies de origen africano, como la focha cornuda, el calamón o el flamenco, con las aves provenientes del norte de Europa, como los ánsares. Entre las rapaces destacan el águila imperial, el buitre leonado y el milano.
En cuanto a los herbívoros, se dan los ciervos, gamos, corzos, muflones y la cabra montés, esta última en retroceso frente al arruí, especie invasora introducida desde África con fines cinegéticos en la década de 1970. Entre los pequeños herbívoros destacan la liebre y el conejo, que constituyen la base de la alimentación de la mayor parte de especies carnívoras del bosque mediterráneo.
Los grandes carnívoros como el lobo ibérico y el lince ibérico están muy amenazados y se limitan a Doñana, Sierra Morena y Despeñaperros. El jabalí, en cambio, se conserva bien por su importancia cinegética. Más abundantes y en distinta situación de conservación, se hallan los carnívoros de menor tamaño, como la nutria, son más abundantes el zorro, el tejón, el turón, la comadreja, el gato montés, la gineta y el meloncillo.
Muy bien sigue así.
ResponderEliminarGloria